La experiencia en el hotel ha sido muy agradable. Resulta acogedor. El personal muy amable. Nos ayudaron en todo lo que les preguntamos.Muy bien situado.Por poner algún pero, a nosotras nos pareció una habitación un poco pequeña , aunque estaba todo muy cuidado y limpio. Y qué el desayuno no está muy conseguido. Es de catering. Aunque no esta malo y es variado. La verdad que es para volver.

Me ha sorprendido mucho para bien. Todo un descubrimiento, la verdad es que no me lo imaginaba así. Es muy chulo y te atienden de maravilla. Esta en pleno barrio gótico, muy bien ubicado para poder pasear por la rambla, el barrio gótico, al lado de la catedral de barcelona y esta lleno de zona de compras y restaurantes para comer.

De vuelta a Barcelona y de nuevo en Malda Singular. Se nota que han hecho mejoras en el hotel, Muchas gracias por todo

Se trata de un pequeño hotel boutique, con la prestigiosa distinción (entre muchas otras ) de Small Luxury Hotels of the World de 17 habitaciones situado en pleno Barrio Gótico, en un enclave especial, como lo es el edificio que antes fue un Palacio, en el interior de las Galerias Maldá.Con una decoración cuidada, y un equipo extraordinario, consiguen el efecto de "sentirse como en casa", tranquilo y silencioso, confortable y con una situación privilegiada, a pocos pasos de los mayores puntos de interés de Barcelona. El equipo siempre está dispuesto a ayudar con cualquier necesidad o información. En las habitaciones, sus suelos de madera, techos altos, y decoración cálida y muy elegante, aportan sensación de ligereza, limpieza y frescura, además de sus vistas al barrio te permiten sentir el día a día de la ciudad. Además de en Barcelona, Cool Rooms tienen propiedades en otras ciudades de España, también en enclaves privilegiados como Madrid, Sevilla y Asturias. Sin duda, una opción extraordinaria que trasmite en cada uno de los lugares donde está presente, la esencia de la ciudad con un trato familiar y personal.

El hotel tiene muy buen servicio. Las instalaciones son conservadoras y elegantes. Los cuartos son muy cómodos, silenciosos y muy limpios. La ubicación es excelente para aquellos que les gusta quedarse en la zona gótica, está a 100 metros de las Ramblas. Algunos de los recepcionistas son muy serios y como que no da confianza preguntarles, pero también estuvo Enrique quien fue sumamente cordial y servicial. Una vez que hicimos la reservación, nos llego un correo en dónde nos mostraban dónde estaba la entrada al hotel y como que me sorprendió ya que está dentro de un centro comercial, pero la verdad no es importante ya que con la clave puedes entrar y salir sin ningún problema. Yo si regresaría a este hotel cuando esté en Barcelona

Muy discreto y bonito. Me encanto.

Lo único que pediría comenzarán el aseo después de un horario conveniente después de las 10am, porque en cuánto el huésped sale, comienza a limpiar lo que se vuelve horrible para descansar, si van saliendo desde las 7amAzote de puertas, utenzilios de limpieza, aspiradora...No descansas lo planeado...

Todo nuevo a estrenar. Las galerías en planta baja tienen unas tiendas temáticas muy interesante.